Domingos en la capital...

  Este fin de semana la primavera nos dió una previa de lo que se viene... El dia se sintió suave, una brisa revoloteando y acariciando, y la felicidad de tener una hamaca paraguaya en el balcón. Me trajo recuerdos de los primeros dias que llegamos al depto, allá por febrero, todavía hacia mucho calor y no habia nada más placentero que llegar, sacar una pinta helada y balancearse para cortar la rutina del dia...
  Las noches estuvieron moviditas y diversas... muchas risas, baile y un poquito de alcohol, de ese que sube directo a la nuca! La vida en la Ciudad no deja de emocionarme, un poco el sabor de la independencia, y otro poco, la novedad diaria de descubrir un mundo de opciones infinitas...
  Los domingos en la capital siempre hay charlas y reflexiones, "reflexiones innecesarias by Batman" , hoy el tópico fue la inteligencia y la brillantez del ser humano, según la vara que tengo en Melmac, el mundo está lleno de seres sabios. Todos son "outstandings" en algo, eso es genial! aunque no estuvieron tan de acuerdo Anita y Paulita, es dificil argumentar cuando se juntan las dos... La reflexión del momento sería: "si aceptáramos con humildad que el mundo está lleno de sabios, la vida en general sería más feliz!" y café mediante la charla derivó en fuckultad y en planes de viaje para festejar el éxito anehelado... ya veremos.
  El almuerzo de hoy salió improvisado, la heladera estaba un toque vacía, encontré dos supremas congeladas, arroz, cebolla y un condimento para arroces... Quedó muy digno, salió una especie de paella mezcla con chow fan... las comensales quedaron muy a gusto! Si le tengo que poner nombre al plato que me inventé le pondría "arroz a la que te nazca". 
  La vida es así, lo que salga, porqué hay planear siempre todo, despues siempre sale al reves... mejor vivir sorprendida.

Alguien está limpiando el baño y otra alguien está leyendo en voz alta ?¿ Yo no soy ninguna de esas, todavía estoy con mi deshabillé puesto, me dá mucho glamour dicen las chicas... A mi me dá paz, no tengo obligación de hacer nada y por eso no me visto, a menos que se me ocurra que tengo ganas de tal cosa. Las horas pasan...